![\"\"](\"https:\/\/soybicentenario.com\/wp-content\/uploads\/2024\/01\/carlos-2.jpg\")
<\/figure>\n<\/div>\n\n\n\nLleg\u00f3 hace trece a\u00f1os a Bicentenario desde San Francisco, damnificado por los derrumbes de aquel barrio. Ten\u00eda 55 a\u00f1os. Hasta entonces hab\u00eda sido costurero remend\u00f3n por herencia de la familia. A la gente le gustaba su trabajo, pero Carlos no iba m\u00e1s all\u00e1 de ese oficio manual. Primero cos\u00eda a mano y luego se rebusc\u00f3 para comprarse una maquinita que le ayudara a agilizar el trabajo. Lleg\u00f3 con ella al barrio.\u00a0<\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n\n\n\n
Estando en nuestro Megabarrio decidi\u00f3 profesionalizarse en dise\u00f1o. \u201cEmpec\u00e9 buscando estudiar alta costura o algo as\u00ed, pero me dijeron que primero ten\u00eda que terminar el bachillerato porque solo hab\u00eda estudiado hasta lo que hoy llaman sexto grado\u201d.<\/p>\n\n\n\n
Fueron tres a\u00f1os de estudios, \u00fatiles para retomar la disciplina acad\u00e9mica y tomar algunos conocimientos. Luego, por fin, la carrera en el Instituto Bolivariano Esdise\u00f1os. Cuando la termin\u00f3 fue a comprar una m\u00e1quina m\u00e1s moderna y empez\u00f3 a trabajar en lo que quer\u00eda. <\/p>\n\n\n\n
\u201cMe buscaron para unos quincea\u00f1eros y les hice un vestuario a las quince muchachas. Me tir\u00e9 m\u00e1s de dos meses haciendo todos los vestidos porque yo trabajo solo. Cuando la gente los vio en la fiesta se gener\u00f3 mucha atracci\u00f3n. \u2013\u00bfY qui\u00e9n hizo el vestuario?\u2013, les preguntaban. \u2013Eso lo hizo Carlos, el que vive aqu\u00ed cerca\u2014, les respond\u00edan. Enseguida empezaron a buscarme para hacer la ropa\u201d, cuenta Carlos en su taller. <\/p>\n\n\n\n
\u201cDe ah\u00ed me dije: \u2013Bueno, creo que ahora s\u00ed ya voy a ejercer mi t\u00edtulo como dise\u00f1ador\u2013. Dibujaba los vestidos, los montaba en Facebook, la gente los miraba y me los encargaba. Tambi\u00e9n me suger\u00edan modas y yo se las hac\u00eda\u201d.<\/p>\n\n\n\n
Uno de esos primeros clientes fue Elkin Mart\u00ednez, tambi\u00e9n de Bicentenario, quien casualmente estaba en el taller el d\u00eda de nuestra entrevista. Elkin le propone dise\u00f1os del estilo contempor\u00e1neo para j\u00f3venes y Carlos los ejecuta.<\/p>\n\n\n\n
El prestigio de Carlos como dise\u00f1ador y costurero fino fue m\u00e1s all\u00e1 del barrio y ahora lo buscan de otras partes. Un frente de trabajo importante es el de los uniformes para los colegios. Ha llegado a hacer hasta 150 trajes de grado en un solo encargo. Tambi\u00e9n le llega mucho pedido para vestuarios de ocasi\u00f3n, como matrimonios, grados, bautizos y primeras comuniones. <\/p>\n\n\n\n
Por esa raz\u00f3n su temporada m\u00e1s fuerte comienza en diciembre, con trajes de ceremonias; en enero y febrero, los uniformes; acerc\u00e1ndose Semana Santa le sale mucho pedido pues la gente quiere hacer encargos para llevar a los pueblos.<\/p>\n\n\n\n
En junio decaen bastante los pedidos y el otro mes complicado es noviembre: \u201cPor las fiestas de la Independencia, la gente no se viste bien; lo que quiere es romper ropa. Luego que pasan me empiezan a llegar los encargos para diciembre\u201d, explica.<\/p>\n\n\n\n
Ha cosido trajes para Leidis Montes, amiga y en su momento reina del barrio El Poz\u00f3n en el Reinado de la Independencia. Tambi\u00e9n saca tiempo para hacer su propio vestuario y prendas para su hija y su hijo, cada uno con su propio hogar en Bicentenario. <\/p>\n\n\n\n
En los \u00faltimos tiempos, con el apoyo de la Fundaci\u00f3n Santo Domingo, est\u00e1 fortaleciendo la parte m\u00e1s formal del negocio: personer\u00eda, C\u00e1mara de Comercio y documentos con la DIAN. \u201cPara el futuro pienso montar mi microempresa en el local que tengo construido al lado y dependiendo de las ayudas o lo que se consiga, terminar de organizar eso y hacer el negocio m\u00e1s grande\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cEn Bicentenario he sido acogido por todo el personal; la atenci\u00f3n y el trabajo que me han brindado me ha hecho crecer m\u00e1s. Yo vivo aqu\u00ed, esto es propio, as\u00ed que no tengo nada que correr a buscar otro lado\u201d.<\/p>\n\n\n\n
D\u2019Carlos<\/strong><\/p>\n\n\n\n Dise\u00f1o y Confecciones de Moda<\/strong> 321 639 03 53\u00a0<\/p>\n\n\n\n <\/p>\n\n\n\n Renunciar a un trabajo que necesitaba fue el comienzo de un camino que hoy la tiene al frente de su propia salsamentaria en La Sevillana.<\/p>\n\n\n\n Cila Montes Toscano<\/strong> lleg\u00f3 a los veinte a\u00f1os a Cartagena buscando oportunidades desde su natal Santa Marta. Compr\u00f3 el lote en La Sevillana hace doce a\u00f1os, pero no lo hab\u00eda construido por falta de recursos. <\/p>\n\n\n\n Hasta que una crisis econ\u00f3mica la oblig\u00f3 a parapetar una construcci\u00f3n en obra negra y entrar a vivir as\u00ed con sus tres hijos, entonces de dieciocho, trece y once a\u00f1os. <\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n\n\n\n \u201cToc\u00f3 acomodarse como se pudiera y echar pa’lante, vendiendo hielo. Lo hac\u00eda en la nevera: esperaba que se congelara una bolsa y las iba montando por un ladito; al d\u00eda vend\u00eda unas quince o veinte. Como entonces no pag\u00e1bamos servicios eso me ayudaba. Tambi\u00e9n me empec\u00e9 a ayudar haciendo aseos o cualquier encargo que me saliera\u201d. <\/p>\n\n\n\n En una esquina sobre la v\u00eda principal del barrio abrieron una salsamentaria. Cila se acerc\u00f3 y convenci\u00f3 a los due\u00f1os de que pod\u00eda ser buena para el trabajo de atender y llevar el negocio. La contrataron, pero los horarios eran brutales: de ocho de la ma\u00f1ana a las doce de la noche incluso.<\/p>\n\n\n\n Al principio no le importaba: era un ingreso indispensable en ese momento. Hasta que se enferm\u00f3, tras cuatro meses en ese ritmo agotador. \u201cYa no daba abasto, mi cuerpecito estaba pasando factura, ten\u00eda las defensas bajas y cog\u00ed un resfriado muy fuerte por el sereno. En Semana Santa dije \u2013Bueno, hasta aqu\u00ed llegu\u00e9\u2013. Les di gracias a los se\u00f1ores, pero les dije que no pod\u00eda m\u00e1s\u201d.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, aunque hubiera sido tan desgastante, hab\u00eda aprendido mucho; ahora ten\u00eda un conocimiento que antes no: inventarios, productos, pedidos, manejo del cliente y del negocio. Eso lo podr\u00eda poner en pr\u00e1ctica en otra actividad econ\u00f3mica.<\/p>\n\n\n\n \u201cMi meta era poner un negocio, pero no sab\u00eda de qu\u00e9. Ten\u00eda muchas ideas, pero antes de ese trabajo no sab\u00eda lo que en realidad significa poner un negocio; no es solamente abrirlo, es que lo puedas administrar bien y lo lleves al servicio de las personas para que te vaya bien a ti\u201d. <\/p>\n\n\n\n Una ma\u00f1ana del pasado abril Cila not\u00f3 que hab\u00edan cerrado aquel negocio. \u201cMe dije \u2013\u00a1Epa!, cerraron porque no consiguieron otra persona\u2013. No hab\u00eda sido mi intenci\u00f3n, pero as\u00ed se dieron las cosas\u201d. Se dio cuenta de que hab\u00eda una oportunidad.<\/p>\n\n\n\n Sin embargo, no ten\u00eda recursos para abrir un negocio. Apenas hab\u00eda vuelto a vender hielo. \u201cAs\u00ed que dije: \u2013Bueno, Se\u00f1or, yo soy tu hija y t\u00fa me vas a ayudar\u2013. Le coment\u00e9 la idea a una gran amiga, que me dijo \u2013T\u00fa tienes el conocimiento\u2013. Y yo le respond\u00ed: \u2013Claro, estoy nuevecita, lo tengo a flor de piel\u2013. Ella me pidi\u00f3 un poco de paciencia para ver c\u00f3mo hac\u00eda\u201d.<\/p>\n\n\n\n Mucha oraci\u00f3n y un pr\u00e9stamo bancario fueron el punto de arranque de esa sociedad con su amiga. El primer mes dispuso de cincuenta productos; al segundo fueron cien y el tercero, ciento cincuenta. Tiene dos tipos de clientes fundamentales: quienes se dedican a la venta de comidas r\u00e1pidas y los vecinos que quieren comer algo distinto.<\/p>\n\n\n\n \u201cEn la salsamentaria vendemos ingredientes para comida r\u00e1pida de todas las especies: patac\u00f3n relleno, arepas rellenas, hamburguesas, perros calientes, salchipapa, deditos, entre otros. Tambi\u00e9n ingredientes para pasteles, pudines, tortas y hasta postres: leche condensada, crema de leche, arequipe, man\u00ed, los mini chip y todo para decorarlos\u201d.<\/p>\n\n\n\n Tambi\u00e9n vende insumos. Por ejemplo, el que vende caf\u00e9 en la calle consigue all\u00ed los vasitos, las cucharillas y el az\u00facar en sobres. Tambi\u00e9n, para otros negocios de comida, empaques de icopor, cajas de cart\u00f3n y dem\u00e1s.<\/p>\n\n\n\n \u201cA mis vecinos les digo, por ejemplo: \u2013Aqu\u00ed tengo unas chuletas que las puedes hacer asadas o en barbecue; tambi\u00e9n preparar estas hamburguesas o estos patacones\u2013, y ellos se van felices con las recetas que les doy\u201d, explica.<\/p>\n\n\n\n Los fines de semana, comenzando el viernes, son d\u00edas de abrir temprano y cerrar cerca de la medianoche. Los domingos antes de un festivo son muy movidos. Pero a diferencia de aquel empleo, aqu\u00ed sus tres hijos le colaboran y le permiten tiempos para descansar como es debido. Hasta la menor, de trece a\u00f1os, conoce lo fundamental de la atenci\u00f3n al cliente.<\/p>\n\n\n\n Por ahora los domicilios en La Sevillana los atiende ella misma y cuando le piden desde Bicentenario suelen enviar al domiciliario en moto. <\/p>\n\n\n\n La meta ahora es crecer. Una buena salsamentaria tiene unas mil referencias de productos, as\u00ed que tiene margen desde los doscientos que maneja ahora. \u201cA veces me duele que vienen buscando un producto que yo no sab\u00eda que exist\u00eda\u201d. Eso la obligar\u00eda a expandir el local, para manejar el inventario.<\/p>\n\n\n\n Salsamentaria V.C.<\/strong><\/p>\n\n\n\n La Sevillana, calle de Megaplaza<\/p>\n\n\n\n 318 670 47 17<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Cuando se acercaba a los sesenta a\u00f1os, Carlos Morillo empez\u00f3 a estudiar para convertirse en dise\u00f1ador. Hoy tiene un negocio propio que ha vestido a centenares de estudiantes y graduados de nuestros colegios, adem\u00e1s de atender una larga lista de clientes locales.\u00a0<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":995,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[32],"tags":[14],"yoast_head":"\n
<\/strong>Manzana 11. Lote 30. Bicentenario<\/p>\n\n\n\nLa constancia de Cila<\/strong><\/h2>\n\n\n\n
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<\/figure>\n<\/div>\n\n\n\n
\u201cEl barrio sigue creciendo y viene la entrega de m\u00e1s urbanizaciones, edificios y casas en Bicentenario. Por eso estoy consolidando mi negocio con el conocimiento que me han dado desde la Fundaci\u00f3n Santo Domingo y la verdad voy en buen camino\u201d.<\/p>\n\n\n\n