![\"\"](\"https:\/\/soybicentenario.com\/wp-content\/uploads\/2022\/04\/arte-1024x535.jpg\")
<\/figure>\n\n\n\n\u201cAquella vez me ilumin\u00f3 para ir a venderle al por mayor a los almacenes y no en la playa. No s\u00e9 si muchos lo van a entender, pero Dios me sac\u00f3 de ah\u00ed. En la playa vend\u00eda mis artesan\u00edas de 2.000 o 2.500 pesos y hac\u00eda hasta cien bandejas. Al por mayor ahora los vendo a seiscientos, pero ac\u00e1 he aprendido a tener m\u00e1s control en las finanzas\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cEl tema de las artesan\u00edas me viene de familia, con mi abuelo y mi t\u00edo. Yo hago llaveros en concha de caracol, caracuchas, pescaditos, tortugas y m\u00e1s cosas como l\u00e1mparas, collares, manillas y figuras decorativas\u201d. Junto a \u00e9l, ocupando el primer piso de la casa, est\u00e1n su esposa Heidi Mar\u00eda Murillo Blanco, y otras mujeres del barrio. Trabajan de manera diligente y discreta para sacar adelante un pedido de seis mil llaveros. Es temprano y arriba su hijo Joel David, de once a\u00f1os, a\u00fan duerme.<\/p>\n\n\n\n
Mario Enrique lleg\u00f3 al barrio hace cuatro a\u00f1os porque lo invitaron a predicar. \u201cEn Bicentenario me ha ido mejor y la vida ha sido diferente; ac\u00e1 hay m\u00e1s privacidad y tranquilidad; estoy prosperando y dirijo una iglesia cristiana evang\u00e9lica. Predico en el boh\u00edo de la supermanzana 76A: all\u00e1 barro, trapeo, colocamos las sillas y hacemos el servicio tres veces a la semana\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cMe hacen pedidos en almacenes del centro de Cartagena, en Santa Marta y San Andr\u00e9s. Para sacar un pedido as\u00ed trabajan conmigo unas diez o doce personas. Uno lava el caracol, otro pinta, otro aplica el brillo y as\u00ed sucesivamente. Cada quien hace su labor y gracias a Dios es una fuente de empleo para los hermanos de la iglesia y personas que vienen de afuera, yo les pago a ellos por producci\u00f3n y gracias a Dios me queda algo para m\u00ed\u201d.<\/p>\n\n\n\n
En el patio almacena conchas y caracoles. \u201cEsta conchita de almeja la compro en la Guajira; me la mandan en un bus y la recojo en La Sevillana. Los caracoles los mando a buscar en Albornoz donde los pescadores le sacan la carne para mariscos y me venden la c\u00e1scara. Sin esto no se puede producir; hay momentos en que quedamos sin nada y me toca hacer llamadas, buscar y salir para tener la materia prima. Este es el sustento para pagar arriendo, alimentaci\u00f3n y servicios. El resto de materiales son el porcelanicron, herrajes, vinilos, brillo, laca y algunos otros. Todo eso lo compr\u00f3 en Bazurto o en el Centro, donde est\u00e9 m\u00e1s econ\u00f3mico\u201d<\/p>\n\n\n\n
Su visi\u00f3n es ense\u00f1ar a otros para que en un d\u00eda puedan independizarse, como ya lo ha hecho con algunos. \u201cEsto es una fuente de empleo para el sustento de muchas familias como la mayor\u00eda de los que est\u00e1n aqu\u00ed. Incluso habl\u00e9 con los pelaos de las manzanas 75B y 76B, que est\u00e1n en un conflicto de pandillas, para hacer un taller. Ellos aceptaron, pero no tuve el apoyo de un local o un lugar para llevarles este material y que ellos puedan salir de esa vida en la que est\u00e1n. Si yo pude salir de esa vida, ellos tambi\u00e9n. Que el tiempo que est\u00e1n en las calles peleando lo dediquen en un espacio donde sus mentes sean transformadas y puedan ayudarles a su familia\u201d.<\/p>\n\n\n\n
Con ese prop\u00f3sito y el de crear un comedor infantil est\u00e1 constituyendo una fundaci\u00f3n llamada \u2018Rescatados por el poder de Cristo\u2019, que es el mismo nombre de la iglesia: \u201clos estatutos ya est\u00e1n autenticados y registrados y estamos en proceso para la personer\u00eda jur\u00eddica\u201d, dice Mario Enrique.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
Antes mi vida hab\u00eda sido un desastre: estaba en las pandillas, drogas, atracador y todas estas cosas. Pero luego me predicaron la palabra del Se\u00f1or: ahora tengo quince a\u00f1os de ser cristiano y de haber salido de ese mundo\u201d, dice en la casa donde vive y tiene el taller, en una esquina de la supermanzana 71.<\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":552,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[20],"tags":[15],"yoast_head":"\n