\n
\u201cCuando trabajaba en Prociencia, mi zona era Bicentenario. Siempre que pasaba en la buseta ve\u00eda una construcci\u00f3n y me preguntaba: \u00bfQu\u00e9 van a hacer ah\u00ed? Hasta que un d\u00eda me enter\u00e9 que era un Centro de Desarrollo Infantil y me dije \u2014Ojal\u00e1 tuviera la oportunidad de trabajar ah\u00ed alg\u00fan d\u00eda\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cMientras estudiaba mi licenciatura, ten\u00eda tareas dirigidas en mi casa, en el barrio Boston. Muchos ni\u00f1os del barrio pasaron por mis manos. Al terminar los estudios ingres\u00e9 a Prociencia, que estaba buscando maestras para el tema de la primera infancia. Apenas eran los pilotos y los contratos duraban solo tres o cuatro meses. <\/p>\n<\/div>\n<\/div>\n\n\n\n
Luego trabaj\u00e9 con Comfenalco, en las primeras unidades pedag\u00f3gicas de apoyo a las madres comunitarias. Volv\u00ed a Prociencia como maestra titular y estando ah\u00ed me ascendieron a coordinadora pedag\u00f3gica. Entonces ten\u00eda a mi cargo quince maestras y un grupo de apoyo con psic\u00f3loga, nutricionista y enfermera. Creo que el ascenso me lo dieron porque ten\u00eda bastantes habilidades de l\u00edder: era de las maestras que iba m\u00e1s all\u00e1 de lo que ten\u00eda que hacer; que siempre estaba anticipando lo que ven\u00eda; mi informaci\u00f3n siempre estaba bien organizada y a la mano. Quiz\u00e1 era un referente para mis compa\u00f1eras que eran maestras como yo; eso ayud\u00f3 para que me dieran la oportunidad y me fue muy bien\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cLos dos \u00faltimos a\u00f1os con ellos me correspondieron aqu\u00ed, en Ciudad del Bicentenario. Las familias me conoc\u00edan y yo a ellas. Pero yo estaba pendiente de mejorar mi salario y tener nuevas experiencias. En el 2014 abrieron la convocatoria en Aieot\u00fa para coordinar el Centro de Desarrollo Infantil. Ya lo hab\u00edan construido, pero le faltaba la dotaci\u00f3n y ponerlo a marchar. Finalmente cuando entr\u00e9, el primer d\u00eda me dije, recordando de cuando pasaba en la buseta: \u2013Bueno, parece que la palabra tuviera poder y se cumplir\u00e1\u2013\u201d.<\/p>\n\n\n\n
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UN CDI en blanco<\/h2>\n\n\n\n \u201cEntonces llego y veo esto inmenso. Era mi primera experiencia en un CDI, aunque ya hab\u00eda trabajado en primera infancia con modalidad familiar. La inducci\u00f3n dur\u00f3 un par de d\u00edas, pero eran demasiadas cosas. Yo no sab\u00eda ni por d\u00f3nde empezar, pero con la orientaci\u00f3n de mi coordinadora empezaron a darse los procesos. El CDI estaba en blanco, no hab\u00eda una sola se\u00f1al ni nada documentado, y empezamos un trabajo arduo de conocimiento, de leer, de tratar de entender. A comienzos de 2015 me llevaron a Bogot\u00e1 a una Asamblea General de Coordinadores y all\u00e1 pude aclarar varias dudas. No todos saben que Aeiot\u00fa es una empresa social que trabaja desde 2009 con el ICBF y que coordina centros en varias ciudades del pa\u00eds, as\u00ed que ah\u00ed hab\u00eda mucha gente con experiencia, para preguntarles\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cLos dos primeros a\u00f1os fueron de adaptabilidad, de conocimiento, de mirar las historias de otros centros. A partir de ah\u00ed, implement\u00e9 mi toque personal. Con el paso del tiempo empezamos a hacer procesos m\u00e1s firmes, con m\u00e1s objetividad en cuanto a lo pedag\u00f3gico, porque la experiencia educativa que manejamos ac\u00e1 es un poco compleja por todas las estrategias que se deben tener en cuenta. Digamos que no es una metodolog\u00eda tradicional porque se tiene muy en cuenta el protagonismo del ni\u00f1o. Aqu\u00ed no se hace nada sin que el ni\u00f1o tenga inter\u00e9s en ello. Luego hacemos las proyecciones anuales con base en los intereses del ni\u00f1o y la familia. El centro comenz\u00f3 a tener su vida, documentaciones, empiezan las historias de las maestras, del equipo, comunidad, ni\u00f1os y familias. El grupo de trabajo pr\u00e1cticamente se ha mantenido desde el primer a\u00f1o\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cAqu\u00ed somos treinta y siete personas y dieciocho de ellas son del barrio. La otra mitad vive en Turbaco, por la Terminal, el Poz\u00f3n. Yo, en Boston, frente a la casa que era de mi abuela. Me siento super orgullosa de lo que hemos logrado, de las historias que podemos contar, de los ni\u00f1os y las ni\u00f1as. Hemos avanzado bastante. Las familias est\u00e1n contentas, como vimos en las encuestas de satisfacci\u00f3n. \u00a1Nos fue muy bien ah\u00ed! La lista de espera est\u00e1 repleta. Me duele que no tengamos la cobertura para acoger a todos esos ni\u00f1os que est\u00e1n esperando entrar. Les gusta lo que hacemos, reconocen nuestro trabajo, el avance de los ni\u00f1os. A pesar de que algunos est\u00e1n en atenci\u00f3n remota han demostrado un muy buen desarrollo de habilidades. Yo me siento orgullosa de liderar este centro y el equipo que tengo no lo cambio por nadie. Todos los d\u00edas me levanto motivada, orgullosa, sacando pecho\u201d.<\/p>\n\n\n\n
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Las metas siguen<\/h2>\n\n\n\n\n
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\u201cSiento que este trabajo no ha sido solamente m\u00edo, sino que mi liderazgo se ha construido a partir de las experiencias de las maestras, de lo que quieren y sus intereses. Este centro est\u00e1 construido con mucho sentido de humanidad: antes de ser jefa y l\u00edder soy un ser humano y creo que eso ha sido una parte de lo que nos ha llevado al \u00e9xito. <\/p>\n<\/div>\n\n\n\n
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<\/figure>\n<\/div>\n<\/div>\n\n\n\nEs algo que me atraviesa, al equipo, la familia y a los ni\u00f1os; el ponerse en los zapatos del otro, escuchar y construir juntos. Si pasa alguna situaci\u00f3n nos reunimos y vemos qu\u00e9 pasa, c\u00f3mo lo podemos abordar y solucionar o c\u00f3mo poder sacar tal meta adelante\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cAeiot\u00fa tiene una l\u00ednea de proyectos sociales distintos a la operaci\u00f3n de los Centros de Desarrollo Infantil. Por ejemplo, hay uno de atenci\u00f3n a las familias migrantes. En esa l\u00ednea quisiera tener la oportunidad de ser l\u00edder. Significar\u00eda un progreso en mi carrera porque el objetivo no solo ser\u00eda la primera infancia sino la familia, con un espectro m\u00e1s amplio y m\u00e1s relaci\u00f3n con otras organizaciones. La cultura de la nuestra fortalece la honestidad como un principio rector; para nadie es desconocido que estos roles o estos proyectos dan para que se hagan cosas de mala manera y que de pronto no se les de buen manejo a los recursos. Aqu\u00ed adentro hay un tema que el equipo se ha apropiado y es que lo que dan para los ni\u00f1os es \u00fanicamente para los ni\u00f1os, sin cabida para m\u00e1s nada\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cCuando cumpla la meta de pasar a un proyecto distinto, creo que ac\u00e1 me van a recordar como un ser humano muy sensible. Eso para m\u00ed es vital y creo que mi equipo se ha levantado sobre esa base. Quiz\u00e1 no todos somos amigos de todos, pero si trabajamos desde el respeto, la escucha y la empat\u00eda. Desde las familias tambi\u00e9n: me mueve mucho que venga una persona a pedir un cupo y no se lo podamos dar; que tenga una condici\u00f3n especial y no haya un cupo.<\/p>\n\n\n\n\n <\/figure>\n<\/figure>\n\n\n\n<\/p>\n\n\n\n
Abuela gozona<\/h2>\n\n\n\n \u201cSoy cartagenera y orgullosa de mi raza negra. Mi infancia fue muy bonita, en una casa grande, en Alcibia, con mi mam\u00e1 y mis tres hermanos. Es algo que est\u00e1 dentro de m\u00ed y siempre lo recordar\u00e9 con mucho cari\u00f1o. Me gustaba montarme en un \u00e1rbol detr\u00e1s de la cocina, a bajar unos mangos grandes y \u00e1cidos, que me pasaba comiendo\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cAnudadas a esas memorias est\u00e1n las vacaciones donde mi abuela, en el barrio Boston. Siempre \u00edbamos todos los primos y le llen\u00e1bamos la casa, durmiendo en unas camas de lona. Mi abuela nos pon\u00eda a moler ma\u00edz para las arepas o los bollos porque la comida era como el centro del amor. Se llamaba Juana Villadiego y era el pilar de la familia. Aunque mi abuela falleci\u00f3, la casa la conserva la familia por parte de una t\u00eda. Ya no nos reunimos tanto porque han ido migrando: una parte est\u00e1 en Cali, otra en Arjona, y el resto en Cartagena\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cMi pap\u00e1 se llama Digno Mauricio Rocha Barboza y mi mam\u00e1, Margarita Cantillo Villadiego. Yo crec\u00ed con \u00e9l hasta los cinco a\u00f1os. Despu\u00e9s ellos se separaron. Cuando ten\u00eda unos dieciocho a\u00f1os nos mudamos a Boston, en la misma calle de mi abuela. Y all\u00ed tuve bastante joven a mis dos hijos: Lady Vanesa Lopez Rocha, que tiene 24 a\u00f1os y ya me hizo abuela. Mi nieto se llama Adan Castro Lopez y tiene cuatro a\u00f1os. Tiene esta abuela \u2018Aeiot\u00fa\u2019, que se pone a jugar con \u00e9l en el piso, que le da prioridad y lo escucha. No me afect\u00f3 para nada tener un nieto tan joven, y la gente se sorprende y me dice \u2013Ay y t\u00fa dejas que te diga abuela\u2013 y yo \u2013\u00a1Claro! Si soy su abuela\u2013\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cMi hija estudia nutrici\u00f3n y diet\u00e9tica en sexto semestre y trabaja en una empresa de log\u00edstica. Mi hijo se llama Jos\u00e9 Antonio. Se gradu\u00f3 este a\u00f1o de Tecnolog\u00eda en Mecatr\u00f3nica en el SENA y va a iniciar la carrera profesional en el Tecnol\u00f3gico de Comfenalco. Con el pap\u00e1 de mis hijos viv\u00ed durante dieciocho a\u00f1os y en ese transcurso estudi\u00e9 una licenciatura en educaci\u00f3n b\u00e1sica\u201d.<\/p>\n\n\n\n
\u201cMi esposo se llama Edgardo Z\u00e1rate R\u00faa. Tenemos una bonita relaci\u00f3n hace ocho a\u00f1os. Me ha brindado una gran estabilidad emocional, es mi compa\u00f1ero para todo. Como mis hijos ya est\u00e1n grandes nada me ata, as\u00ed que con frecuencia nos vamos a Barranquilla, donde su familia. Tiene una compa\u00f1\u00eda de mantenimientos y gracias a Dios le va bien\u201d.<\/p>\n\n\n\n
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\u201cMe encanta mantenerme f\u00edsicamente, tengo una rutina en gimnasio dos o tres veces a la semana y camino todos los d\u00edas desde mi casa hasta la plaza de toros. Entre treinta y cuarenta y cinco minutos diarios de actividad f\u00edsica. Cuando no lo hago estoy mal. A veces me toca venirme super temprano y no me da tiempo. Ese es un d\u00eda que no disfruto tanto, porque no me activo. <\/p>\n<\/div>\n\n\n\n
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<\/figure>\n<\/div>\n<\/div>\n\n\n\nMe encanta el vallenato cl\u00e1sico: el s\u00e1bado el oficio en mi casa es con La Reina o con vallenatos del Binomio de Oro, de Los Diablitos, o de los viejitos de Diomedes. La salsa vieja tambi\u00e9n me encanta, adem\u00e1s disfruto mucho de bailar y salir con mi pareja en los carnavales de Barranquilla\u201d.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
Cuando trabajaba en Prociencia, mi zona era Bicentenario. Siempre que pasaba en la buseta ve\u00eda una construcci\u00f3n y me preguntaba: \u00bfQu\u00e9 van a hacer ah\u00ed? Hasta que un d\u00eda me enter\u00e9 que era un Centro de Desarrollo Infantil y me dije \u2014Ojal\u00e1 tuviera la oportunidad de trabajar ah\u00ed alg\u00fan d\u00eda\u2014\u201d. <\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":138,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[5],"tags":[15],"yoast_head":"\n
IRIS ROCHA - Por una infancia feliz - soybicentenario.com<\/title>\n \n \n \n \n \n \n \n \n \n \n \n\t \n\t \n\t \n \n \n \n \n \n \n\t \n\t \n\t \n